La humedad, es decir, la cantidad de vapor de agua presente en el aire, debe mantenerse en unos valores entre el 40 y el 60% de humedad relativa en ambientes interiores.
Este porcentaje minimiza la supervivencia o la infectividad de bacterias y virus transmitidos por el aire, las colonias de ácaros disminuyen y la mayor parte de las familias de hongos no crecen.
El baño es uno de los lugares donde se produce una mayor condensación de vapor de agua. Las gotas que quedan en paredes, espejos y superficies crean un ambiente cálido y muy húmedo con las condiciones perfectas para que el moho crezca y se reproduzca.
La Organización Mundial de la Salud señala que la presencia de la humedad se vincula de manera directa con un incremento de infecciones respiratorias, asma y exacerbación del asma, disnea, bronquitis y rinitis alérgica.
Otras enfermedades causadas por moho y humedad son:
– Reacciones alérgicas al respirar o entrar en contacto directo con el moho y las esporas
– Empeoramiento de dolencias reumáticas y óseas
– Agravamiento de las cefaleas tensionales crónicas
Cómo prevenir y combatir la humedad en el hogar:
Ventilar: dejar circular el aire por los diferentes sectores de 10 a 20 minutos y entre una y tres veces al día. En el caso del baño, si dispone de ventana, dejarla abierta tras la ducha o usar un deshumidificador.
Usá un sistema de ventilación mecánica controlada: instalando este sistema se puede establecer de manera automática la cantidad y la calidad del aire interior de tu casa, eliminando los contaminantes y manteniendo unos niveles óptimos de humedad.
Poné en marcha el extractor al cocinar y tapar las ollas cuando se cocina: así evitás expandir el vapor de agua que se genera.
En invierno, usá la calefacción de forma sensata: mantené una temperatura entre 21 y 23ºC de día y de unos 17ºC por la noche. Tené en cuenta que el aire caliente genera más humedad que el aire frío.
Elementos absorbentes: hay ciertos ingredientes como el arroz, el bicarbonato o el bórax que son capaces de absorber la humedad en áreas pequeñas. Es buena idea poner un poco de estos productos en envases y colocarlos en zonas problemáticas como armarios de ropa y estanterías.