En el fútbol por algo se dice que, hasta que no está la firma, nada puede darse por hecho. Menos cuando los acuerdos son de palabra. El claro ejemplo es el de Matías Palavecino, con el que Colón tenía todo muy avanzado, pero aparecieron diferencias de último momento y la operación se cayó.
Incluso la dirigencia ya está analizando otras alternativas en el mercado en busca del reemplazante del lesionado Ignacio Lago, que se perderá lo que resta de campeonato por la rotura de ligamentos de la rodilla izquierda.
Si bien todo es extraoficial, todo habría pasado por lo económico, atendiendo también a que se trata de un jugador que casi no jugó en el año (apenas 41' en tres partidos). La dirigencia está dispuesta a hacer un esfuerzo, pero tampoco firmando lo que no puede.
Entonces, se estaría mirando qué hay disponible dentro de un mercado austero. En la Primera Nacional es probable que nadie quiere desprender de jugadores, por lo que se miraría a la Liga Profesional, pero donde haya nombres relegados y que estén, desde ya, al alcance. Por lo pronto, lo de Palavecino ya no corre y Colón busca otro nombre por pedido del técnico.