El mecanismo, puesto a punto a través de la inteligencia artificial por expertos del Massachusetts Institute of Technology (MIT), podría ser la nueva vía para estudiar los disturbios del sueño.
Los resultados de la investigación, coordinada por Dina Katabi, fueron presentados en Australia, en el marco de la Conferencia Internacional sobre Aprendizaje Automático.
El dispositivo que controla el sueño es similar a un "router" utilizado para el servicio de Wi-Fi: emite señales de radio de baja potencia e interpreta los datos relevados por el efecto de las ondas en el organismo.
El experimento se llevó a cabo en 25 voluntarios y demostró ser capaz de reconocer las diversas fases del sueño con una precisión del 80%.
Por lo tanto, alcanzó a distinguir el sueño ligero del profundo, relacionado con la fase REM, caracterizada por sueños intensos y movimientos de los ojos rítmicos y veloces.
El enfoque se basa sobre un sistema anterior desarrollado por el mismo equipo de investigadores para evaluar, con las ondas de radio, parámetros vitales como el ritmo cardíaco y el de la respiración.
El principio se basa en la observación que, cuando las ondas de radio entran en contacto con el cuerpo humano, cualquier movimiento, como el del ritmo cardíaco y el de la respiración, altera levemente su frecuencia y, como consecuencia, el análisis de la señal puede revelar estos parámetros.
Debido a que en las diversas fases del sueño la frecuencia cardíaca y el ritmo de la respiración se modifican, los investigadores decidieron utilizar el análisis de estos parámetros vitales para controlar el desarrollo del