Los dueños de cantinas ecolares están indiganos proque a muchos de ellos aún no le spermitieron abrir sus negocios dentro de los establecimientos educativos.
Viviana, dueña de una cantina escolar, expresó que “seguimos en la incertidumbre porque habilitaron muy pocas cantinas en las escuelas. En mi caso me habilita la directora pero los cooperadores están evaluando la situación. Una cantina es similar a un kiosco adentro de la escuela. No es razonable que nos tengan así. El año pasado sólo pudimos trabajar 6 días y no recibimos ayuda del estado porque éramos monotributistas clase C”.
Además, Viviana agregó que “tenemos todos los protocolos aprobados. No entendemos por qué tantas vueltas y tantas dilaciones. A todos los problemas que cargamos le tenemos que sumar que tampoco nos dejarán vender fraccionado. Lo que viene empaquetado es muy caro para las escuelas humildes”.