La Universidad Nacional del Litoral (UNL) promueve hábitos saludables a través de diferentes acciones cuya finalidad es la de impulsar conductas y comportamientos que benefician el bienestar físico, mental y social de toda la comunidad universitaria. Hacer actividad física es uno de los pilares más importantes para tener una buena calidad de vida y un cuerpo saludable, usar la bicicleta como modo de transporte es una de las formas más eficiente de hacerlo.
En una actividad virtual que se concretó a través de la plataforma Zoom, el rector Enrique Mammarella; y el secretario de Bienestar, Salud y Calidad de Vida, Marcelo Mendoza, dialogaron con las y los 80 estudiantes becados que recibieron su bicicleta. Además, el equipo de trabajo de movilidad realizó una charla sobre seguridad vial.
En bici a la UNL
La UNL, desde el 2015 a la actualidad, entregó un total de 270 bicicletas apostando a la movilidad sostenible entendiendo a la misma como una herramienta de transformación social que tiene la capacidad de reducir las externalidades causadas por el sistema de transporte actual.
Integrantes del equipo de la Secretaría de Bienestar, Salud y Calidad de Vida afirman que: “con el fin de acompañar las políticas que lleva adelante la Universidad en cuestiones de sostenibilidad ambiental, económica y social, esta propuesta está centrada en acompañar un cambio de paradigma relacionado con la forma en la que nos movemos por el espacio público y nos trasladamos hacia nuestros lugares de estudio y trabajo”.
En Latinoamérica hay un notable crecimiento en cuanto a la expansión de las ciudades, al aumento de población, el consumo, la urbanización y el parque automotor. Frente a esto, el sistema de transporte ha podido responder a esa demanda generando un impacto negativo en lo ambiental y en la salud de la población. Actualmente las ciudades presentan dificultades y problemáticas como contaminación, congestión, siniestralidad, exclusión y demás externalidades negativas del sistema de transporte que afectan la calidad de vida de toda la ciudadanía.
Con la entrega de nuevas bicicletas se busca mejorar la calidad de vida de la población estudiantil. Es un modo de transporte económico, no demanda inversiones significativas, tanto su mecánica como su mantenimiento son accesibles y de bajo costo. Es ecológica, no necesita combustible ni produce contaminación sonora, por lo tanto beneficia al medio ambiente. Es la forma más fácil y eficiente de moverse por la ciudad. Desde el punto de vista del tránsito y la seguridad vial, una disminución en el número de automóviles que circulan por la ciudad y un aumento del uso de la bicicleta, mejoraría la fluidez y la seguridad en el tráfico, solucionando de esta manera muchos problemas viales.