Esteban Lindor Alvarado, condenado recientemente a prisión perpetua por la Justicia provincial, ahora enfrenta un pedido de 20 años de cárcel de la Justicia federal. La solicitud la hizo el fiscal federal Fernando Arrigo este lunes durante su alegato de clausura en el juicio por narcotráfico, donde se lo acusa a “El Esteban” por un cargamento de 493 kilos de marihuana que fue secuestrado en noviembre de 2017 en General Roca, Río Negro.
“El pedido estuvo fundado en la mecánica de la instauración de toda la organización que intervino para el traslado de la droga, con el uso de personas físicas y jurídicas y de testaferros”, dijo Arrigo luego de alegar en los tribunales federales.
El fiscal añadió que también tuvo en cuenta para el pedido de la pena “el nivel de violencia que manejaba la organización” criminal liderada por Alvarado, de lo que dieron cuenta “los testigos del juicio”.
Además, el representante del Ministerio Público Fiscal pidió al Tribunal, presidido por el juez Ricardo Vázquez e integrado por Otmar Palucci y Eugenio Rodríguez, que se desarchive una causa en la que se investigó a funcionarios policiales por presunto encubrimiento de la banda de Alvarado. Se presume que es un desprendimiento de una investigación de 2013 contra agentes de la División Judicial de la Unidad Regional II que, casualmente, era la que allanaba e investigaba a Los Monos, la organización rival en la venta de droga.
También solicitó que se investigue a otras personas que fueron mencionadas en las escuchas que se reprodujeron en el debate oral.
En este juicio, iniciado en febrero pasado, Alvarado está acusado de ser el organizador del transporte de 493 kilos de marihuana a la provincia de Río Negro.
El cargamento con droga fue secuestrado por la policía de esa provincia el 24 de noviembre de 2017 en un camión Scania con un semirremolque, en el que viajaban dos hermanos identificados como Jesús José y Marcos Esteban Rodríguez.
Según la investigación, el transporte de carga era precedido por un Chevrolet Vectra que operaba como “puntero” (para advertir posibles controles policiales), que era conducido por un hombre llamado José Luis Di Marco y en el que también viajaba Ricardo Ariel Ianni.