La llegada de fin de año marca una época de balances, reflexiones y también de apertura o cierre de ciclos. En ese sentido, Andrea Rincón puso punto final a uno importante en su vida. A través de un posteo en Instagram, la actriz habló del fuerte proceso que atravesó. Pero nada tiene que ver con los rumores de separación de Mauricio Corrado, que habían circulado, sino que la mediática se refería a una situación espiritual que vivió desde su conversión al cristianismo.
La llegada de fin de año marca una época de balances, reflexiones y también de apertura o cierre de ciclos. En ese sentido, Andrea Rincón puso punto final a uno importante en su vida. A través de un posteo en Instagram, la actriz habló del fuerte proceso que atravesó. Pero nada tiene que ver con los rumores de separación de Mauricio Corrado, que habían circulado, sino que la mediática se refería a una situación espiritual que vivió desde su conversión al cristianismo.
Luego, Rincón continuó relatando el proceso que había atravesado y las dificultades que tuvo que sortear: “Y gracias, con el corazón en la mano para todos aquellos que me acompañaron en este Año tan difícil pero tan necesario, y aún más a los que no creen en Dios, porque la empatía y el amor incondicional que me demostraron hacia mí, no lo voy a olvidar nunca. Jamás imaginé que cuando uno decía “me estoy desangrando”, el sentido figurado podría transformarse en literal. Pero ya ven, Dios hace milagros y a veces hay que morir para renacer siendo una mejor persona y más fuerte”.
A partir de sus palabras, muchos seguidores comenzaron a especular si el mensaje no escondía una indirecta sobre su relación. Así comenzó a circular el rumor de que se había separado. Ante ese panorama, Teleshow habló con la actriz, quien desmintió la situación y explicó el detrás de escena de sus palabras: “La verdad es que no entiendo de donde sacaron eso. El mensaje que subí a Instagram lo escribí al lado de Mauricio, de hecho la primera parte se la mandé a él. No hay nada más lejos de la realidad. De lo que hablo de desangrarme es algo que conté que me pasaron muchas cosas que fueron muy difíciles de entender, ya hace cinco años me había pasado con el tema de cuando conocí a Dios, hace cinco años me estaban pasando cosas muy extrañas”.
De esta manera, la mediática siguió explicando los problemas que vivía tiempo atrás y cómo fue el inicio de este camino de sanación y de espiritualidad: “No podía dormir, vino una mina a decirme que me habían hecho un trabajo, yo no lo creía. Unos pastores me hicieron una imposición de manos y terminé tirada en el piso convulsionando, literal. Después, en febrero, empecé a ir a iglesias, tenía ataques de pánico, y después de eso con Mauricio nos pasó algo extraño. Mientras estábamos orando, sentí que me moría, de hecho llamamos a la ambulancia y ahí empezamos a hacer ‘liberación’. Entre las liberaciones me dijeron larga la saliva y empecé a escupir sangre, a él le pasó lo mismo. Es muy raro pero es real, me hice estudios, ahora ya no me pasa más, fue como una limpieza”.
Continuando con su relato, Rincón expresó la impresión que le generaba y los sentimientos que atravesó: “Me dio mucho miedo en ese momento. Te dicen que son trabajos, ataduras, no tengo idea qué fue, pero fue tremendo, tuve como un cambio de paradigma este año”. Respecto a su relación con su futuro marido, la actriz fue clara y despejó todos los rumores de separación: “No tiene explicación científica, no tiene que ver con separación, con Mauricio está todo bien, nos amamos, de hecho él me acompañó en todo el proceso. Él en el perfil tiene una foto conmigo, no nos peleamos. El jueves cenamos, hicimos una despedida de fin de año, nos fuimos a comer con amigos. Esto arrancó hace cinco años y por eso me hice tan devota de Dios y Jesucristo, antes no creía pero ahora no me dejó otra”.