Mientras Unión se está armando para afrontar la Copa de la Liga y la Copa Argentina en el primer semestre del año, hay otros temas claves que deben resolverse cuanto antes. En este caso, las inhibiciones, porque sino estaría imposibilitado de usar las incorporaciones.
Vale recordar que el Tate está inhibido por Deportivo Capiatá de Paraguay al adeudar el pase de Junior Marabel, que ya fue prestado a Palestino de Chile. Son 600.000 dólares que se buscan saldar, por ahora sin acuerdo, ya que el elenco guaraní quiere el dinero al contado y no en cuotas.
Pero no es lo único. El Club Social y Deportivo Itapuense de Encarnación, que registró el paso de Juan Carlos Portillo demandó a Unión por 32.059,79 dólares en concepto de “indemnización por formación".
Y se suma a los 65.000 dólares (más intereses) que no le pagó a Independiente Medellín de Colombia por Bryan Castrillón.
Son más de 700.000 dólares que la dirigencia dice tener, pero que no los puede girar por las restricciones. El tiempo corre y es un tema por ahora sin solución. A medida que se aproxime el campeonato, la tensión será mayor.