La situación económica actual llevó al ajuste en las economías familiares y esto se refleja en una temperada turística con mucha menor demanda a la de años anteriores.
Guillermo Kess, Referente de la Cámara de Cabañeros y Prestadores de Servicios Turísticos de la Provincia de Santa Fe (Cabasetur), comentó por LT10 que “es muy difícil ser optimistas. A nosotros nos toca ser optimistas porque vendemos algo que a lo mejor es la ilusión de mucha gente que quiere descansar y bajar un cambio”.
En este sentido, reconoce que luego de hablar con muchos asociados, están entre un 30% y 40% menos por debajo de la demanda que tuvieron durante enero del 2023 y durante este mes, mucho no llegaron al 50% de ocupación.
Por otro lado, muchos optaron por hacer algunas ofertas como hospedarse 4 días y pagar 3 lo cual tuvo buenos resultados en algunos casos.
Para Kess la poca demanda no es algo exclusivo de la costa santafesina y comenta que “a cualquier lugar que vayas notas una caída. Hay destinos de avisajes de ballena que estaban pensando en que termina enero y cerrar la temporada para entender la gravedad” y explica que en nuestra provincia es más difícil porque no tiene una tradición turística.
En contraposición de esto, Kess aclara que están notando que en febrero si hay más consultas y más reservas “hay muchos complejos que están diciendo que para carnavales ya han llegado a una reserva plena o casi plena”
¿Cuánto sale una cabaña?
Una cabaña para dos o tres personas entre 30 mil y 40 mil pesos que puede ser un poco mayor si se incluye algún otro servicio como mucama o desayuno.