En las páginas de Internet existen medidas de ciberseguridad, ya que cada vez son más los ataques de hackers, estafas, robos de identidad, de información personal y bancaria.
Para evitar todo esto, tené en cuenta cinco formas de mantenerte seguro a la hora de navegar en la web.
Verificá la URL o dirección: la URL de un sitio web es su dirección, que se encuentra en la barra superior de tu navegador y que generalmente comienza con www. Los ciberdelincuentes, al clonar una página, usan una URL similar a la original. A veces con una letra cambiada, o con una letra de más, como por ejemplo un guion, o con algún error ortográfico sutil.
Comprobá el Protocolo de Seguridad: el protocolo HTTPS encripta la información que se transmite entre la página y tu dispositivo para proteger tus datos de posibles robos. Para verificar esto, buscá el ícono de un candado en la barra de direcciones del navegador. Si está presente y el sitio web comienza con https://, significa que es seguro, indica el portal Metro World News.
Chequeá la Autenticidad del Certificado SSL: cuando un sitio web usa HTTPS, también tiene un certificado SSL (Secure Socket Layer) que valida su autenticidad. Al hacer click en el candado en la barra de direcciones, podrás ver más detalles sobre el certificado. Asegurate de que contenga una certificación y de que no haya advertencias de seguridad.
Buscá errores de ortografía e identificá el tono y estilo de los textos: las páginas falsas o clones son creadas especialmente para engañar a los usuarios. A veces son armadas en otros países y por personas que no hablan nuestro mismo idioma. Por eso, un signo de que es falsa es la presencia de errores ortográficos o gramaticales en los textos, modismos, palabras que no usamos, etc.
Comprobá la Política de Privacidad del sitio: los sitios web seguros y oficiales suelen tener a disposición una política de privacidad detallada. Este documento debería explicar cómo se recopilan, almacenan y usan tus datos personales.