Este jueves, el Indec dio a conocer los índices de pobreza e indigencia, y los números resultan alarmantes, tanto a nivel país como para Santa Fe.
Desde el movimiento Los Sin Techo, José Luis Zalazar advirtió que el aumento de ambos flagelos "es sistemático" y que "cada día hay más gente que no come".
"Eso es lo más preocupante, la indigencia, que alcanzó números críticos, alarmantes, que asustan, y que es una bomba que tenemos debajo de la mesa que a veces no la queremos ver", sostuvo.
En ese sentido, remarcó: "hoy para no ser pobre hay que ganar alrededor de 900 mil pesos, pero hay gente con alguna 'defensa' (comercio, industria, docentes, jubilados); la democracia les ha dado herramientas para que se defiendan"; en cambio, los indigentes están fuera del sistema.
"La gente ya no pide plata, pide para comer. No quiere dinero, quiere comer. No tiene para comer", insistió. "Esas familias no se alimentan, no les llegan las calorías, los chicos son violentos, se duermen en la escuela, no terminan ni el séptimo grado. Es un problema que cada vez se agrava más", lamentó.
Asimismo, Zalazar explicó: "El Gobierno ha mantenido la AUH y la tarjeta Alimentar, y las ha aumentado de acuerdo a la inflación; lo que sucede es que la recesión es tan profunda que se acabaron las changas. Los indigentes changueaban y llegaban a la pobreza, a los 400 mil pesos para no ser indigentes. Hoy les faltan 200 mil pesos que no los tienen porque se terminó el cortapasto, el medio albañil, el pintor. Porque la clase media ha caído en la pobreza".
"La culpable de esta catástrofe es la gran recesión que hay. La gente nos pide un kilo de arroz porque no hay salida. Hay papás que eligen si los chicos comen al mediodía o a la noche. Yo lo veo y no tengo solución. Antes tenía mercadería, pero no tenemos más. Ya tocamos el fondo de la lata", añadió.
Y finalmente, concluyó: "Cuando el Estado se pone al margen de este problema aparecen estos terremotos, porque el Estado es el primer promotor de la justicia social y el bien común. Es el que tiene que asistir este problema grave. Estos chicos que no terminan séptimo grado este año, les firmo la condena, porque no van a ir a la secundaria y yo sé cuál va a ser su destino".