Frente a las críticas por la reforma judicial que impulsa el Gobierno, el presidente Alberto Fernández aclaró esta mañana que se trata de "un proyecto de ley que va al Congreso", por lo cual la oposición "tiene todas las posibilidades de plantear sus pareceres y proponer correcciones".
"Estamos en un momento único donde las decisiones no deben ser impuestas, sino que deben ser construidas. Ayer lo que se hizo fue mandar un proyecto de ley al Congreso; la oposición tiene todas las posibilidades plantear sus pareceres y proponer sus correcciones", garantizó el primer mandatario en declaraciones radiales.
"Estamos absolutamente abiertos a cambios porque lo único que queremos es que la Justicia funcione de otro modo. No firmamos un decreto cambiando la Justicia", insistió.
Además, aclaró que la intención de su Gobierno no es revisar "cuántos miembros tiene que tener la Corte". "Con cinco miembros pueden funcionar perfectamente. No es eso", remarcó.
"El recurso extraordinario de la Corte se fue ampliando poco a poco. La Corte empezó a intervenir cada vez más. Hoy la Corte define cómo interviene con una arbitrariedad absoluta", opinó Fernández, y sentenció: "La Corte funciona mal".