Tener un perro como mascota no solo da alegría a la vida cotidiana, sino que también conlleva múltiples beneficios para la salud física y mental de las personas. Estudios han demostrado que los perros fomentan el bienestar emocional, reducen los niveles de estrés y hasta mejoran la condición cardiovascular de sus dueños.
Son fieles, cariñosos y siempre están de buen humor, lo cual ayuda al bienestar saludable de las personas, y su alegría al ver llegar a sus dueños después de una jornada laboral es impagable. Hace tiempo dejaron de ser una mascota para entretener a los niños de la casa, ya que ahora son considerados como un miembro más de la familia. Entre otras cuestiones, cada vez más personas eligen adoptar un perro porque también son muy compañeros y leales.
El estudio que lo afirma fue realizado por la Universidad Konkuk de Corea del Sur, donde analizaron todo tipo de actividades diarias que los humanos y perros realizan en conjunto y mediante el idioma no verbal, el vínculo que se genera es muy fuerte y crece a diario. la investigación llegó a la conclusión de que el impacto positivo en la mente como en el cuerpo es muy beneficioso. Al igual que los humanos, los perros tienen sentimientos y cuando uno deja de acariciarlos enseguida se hacen oír con un tono “comprador” para volver a recibirlas; también con sus “manos” piden más caricias.
Cuidarlos y dedicarles tiempo es el mejor regalo que la persona puede hacer y saber que recibirá el doble de cariño.
Todos los perros son cariñosos y lindos por naturaleza, como así también inteligentes. Por eso, más allá de los aspectos positivos para la salud, elegir una raza de perro puede hacer que la convivencia en casa sea aún más gratificante. Vivir con uno es una excelente idea porque el dueño puede dedicarle todo el tiempo que el perro se merece y necesita.
Beneficios de vivir con perro en casa
Uno de los impactos más notables de tener un perro es la mejora en el estado anímico y reduce la ansiedad. Pasear con un perro, acariciarlo o simplemente tenerlo cerca puede liberar oxitocina, una hormona que promueve el bienestar. Además, los perros son compañeros leales que brindan un apoyo emocional único, ideal para quienes viven solos o buscan un refugio en momentos difíciles.
Otro gran beneficio es la actividad física. Tener un perro obliga a sus dueños a moverse más, ya sea para sacarlo a pasear o para jugar, lo cual ayuda a mantener un estilo de vida activo. Esto puede ser especialmente útil para aquellas personas que llevan una vida sedentaria.
Finalmente, los perros también pueden tener un impacto positivo en la vida social. Pasearlos en parques, plazas o simplemente por el barrio puede hacer conocer más personas hasta entonces desconocidas porque los perros buscan jugar juntos y así sus dueños se acercan a charlar. Los perros son el inicio de una nueva relación social.