En cada fecha del calendario de la Fórmula 1, las gradas de los circuitos suelen estar ocupadas mayoritariamente por los tifosis de Ferrari, aunque la irrupción de Franco Colapinto le devolvió el aliento argentino a la Máxima, aquel que se hace sentir más que ninguno.
Muchas fechas cuentan con un piloto anfitrión de turno, pero en ningún país el aliento es más fuerte como el que recibe Sergio Checo Pérez en el Gran Premio de México, a disputarse este fin de semana. Un acompañamiento fervoroso, al igual que el que recibe Colapinto. Acaso, el argentino también recibirá apoyo en la primera fecha latinoamericana.
Son varios los puntos de contacto entre los dos pilotos latinos. Coincidencias que el propio Checo Pérez comentó este miércoles en una conferencia que ofreció, ya en su país natal previo al inicio de la competencia este viernes.
"Franco lo está haciendo muy bien. Tengo mucha conexión con él porque, al fin y al cabo, pasamos por lo mismo para llegar a la hasta la F1. Él se tuvo que ir a muy temprana edad, dejó su adolescencia atrás, porque se fue completamente sólo. No digo que el piloto europeo tenga más méritos. Todos tienen una gran historia y pasan por muchísimas cosas, pero sin duda, para un piloto latino es aún más desafiante", señaló el mexicano.