Tanto se habló de lo chica que era la cancha de Brown de Adrogué, que podía ser un problema para el tipo de juego de Colón y, sin embargo, no solo fue superior sino que además lo goleó 4-0. Luego, se conoció que el dato igual no pasó desapercibido y que Iván Delfino lo tuvo en cuenta en la previa, ya que redujo las dimensiones en el campo del predio para tener una medida.
Ahora el escenario es muy similar, ya que el lunes le tocará visitar a Defensores de Belgrano, cuyo campo de juego está también entre los más reducidos de la divisional: 98 x 68 metros. Hasta el momento el Dragón se hizo muy fuerte y en Colón no quieren dejarlo pasar.
Juega en el estadio Juan Pascuale con capacidad para 9.000 espectadores, por lo que no asoma como imponente. Pero a veces eso no es necesario para presionar y hacer sentir rigor. Un Colón que claramente es el equipo a vencer y todos buscarán lucirse.
Habrá que ver si esto tendrá injerencia o bien, el elenco santafesino vuelve a sacar a relucir su jerarquía. Hoy está dulce, pero no se confía. Clave en un torneo largo.